Día catorce, Himeji, Kobe, los impresionantes castillos japoneses
Nos despertamos a eso de las 10.00 como unos marqueses jejeje, aún, aunque ya teníamos algo claro de ir a Himeji y a Kobe no estábamos muy convencidos, pero nos armamos de valor y fuimos directos a la estación del tren.
Cogimos el Shinkansen dirección a Himeji que estaba más lejos y fuimos a ver el castillo de Himeji, patrimonio de la humanidad, que es muy bonito e impresionante, unos italianos compañeros de viaje que conocimos en kyoto nos comentó que no valía la pena entrar, mucha gente, no tiene muebles, muchas escaleras, etc… pero nada de interesante. Que lo mejor era ir por fuera, hacer las fotos de rigor y dar un paseo. Y eso hicimos, al terminar decidimos ir a Kobe, que en realidad no tiene ningún atractivo, es una zona relativamente bonita donde puedes disfrutar de la zona Kitano, un lugar muy pintoresco, con matices americanas, y europeas, es una zona de ricos, porque estaba llena de cochazos, hicimos algunas fotos al lugar y decidimos caminar hacia el sur, donde pasamos por algunas zonas llenas de gente, muy comerciales. Ya era de noche por lo que cogimos el metro a la estación y nos fuimos a Kyoto a pasar nuestra última noche ya que nos íbamos a Hiroshima y Miyajima.